Dolmen de Alberite: Monumento megalítico en Villamartín

Para quienes amamos los vestigios del pasado, el Dolmen de Alberite representa una página fascinante en el libro de la historia humana. Este tesoro arqueológico, anclado en los llanos de Villamartín, nos permite asomarnos al mundo de nuestros ancestros neolíticos y su compleja cosmovisión.

Nos sumergiremos en un viaje al pasado para descubrir, a través de las piedras milenarias de este monumento megalítico, las claves de una sociedad que, aunque distante en el tiempo, sienta las bases de nuestra propia cultura.

¿Qué es el Dolmen de Alberite y por qué es importante?

El Dolmen de Alberite es mucho más que un montón de piedras. Es uno de los monumentos megalíticos más significativos de Andalucía y uno de los más antiguos de la península ibérica, con una antigüedad que ronda los 6000 años. Este sitio no solo es un vestigio arqueológico; es un testimonio de la vida y creencias de la sociedad neolítica que habitó la región de Villamartín.

La importancia de este dolmen radica en su capacidad de contar una historia, la de un grupo humano que, en un esfuerzo colectivo, erigió este monumento para honrar a sus muertos y perpetuar su memoria. La magnificencia de su estructura y la riqueza de los hallazgos encontrados en su interior ofrecen un panorama de las prácticas funerarias y de la estructura social de la época.

La presencia de arte rupestre, con pinturas y grabados, añade una dimensión artística y simbólica que captura el imaginario colectivo de nuestros ancestros, mientras que los ajuares funerarios nos hablan de sus costumbres y rituales.

¿Cuál es la historia del Dolmen de Alberite?

La historia del Dolmen de Alberite es la historia de un legado que se remonta a 4000 a.C. Este monumento megalítico, situado estratégicamente en los Llanos de Villamartín, formaba parte de una necrópolis que contenía otras sepulturas, delineando así un paisaje ceremonial de gran envergadura.

Este sitio ha sido testigo de los cambios en el paisaje y la sociedad. Desde su construcción, ha visto pasar milenios hasta que finalmente fue descubierto en 1993, lo que provocó una ola de interés y estudios que continúan hasta el día de hoy.

El trabajo constante de investigadores y la Universidad de Cádiz ha permitido que este dolmen no solo sea exhumado y estudiado, sino también conservado para la posteridad. Cada capa de tierra removida nos ha acercado un poco más a comprender la vida y muerte de aquellos que nos precedieron.

¿Qué restos se han encontrado en el Dolmen de Alberite?

Palpando las profundidades de la cámara sepulcral del Dolmen de Alberite, los arqueólogos se toparon con un hallazgo que trasciende el tiempo: restos de dos individuos que, aún en la muerte, nos hablan de su existencia. Estos esqueletos venían acompañados de un ajuar funerario que incluye herramientas de piedra, cuentas de collar y un cristal de cuarzo; objetos que revelan un nexo con la naturaleza y el más allá.

Las excavaciones también sacaron a la luz fragmentos de cerámica de distintas épocas, brindando evidencias de que el lugar fue utilizado y reutilizado a lo largo de los siglos. Estos restos nos cuentan historias de intercambios culturales, de evolución social y de la perpetuación de un sitio considerado sagrado por generaciones.

¿Cómo se descubrió el Dolmen de Alberite?

El descubrimiento del Dolmen de Alberite fue producto de una serie de eventos fortuitos. Tras un acto de expolio en 1993, las autoridades tomaron conciencia de la existencia de este patrimonio oculto. Como resultado, se iniciaron las excavaciones arqueológicas que desvelarían uno de los dólmenes más impresionantes de la región.

Un equipo de la Universidad de Cádiz tomó las riendas de la investigación, y lo que inicialmente pudo ser una pérdida irreparable para la herencia cultural se convirtió en una oportunidad para descubrir y proteger la riqueza histórica de Andalucía. El dolmen, que había permanecido oculto y casi intacto bajo tierra, fue lentamente revelando sus secretos a través del meticuloso trabajo de los arqueólogos.

Este proceso de descubrimiento y análisis no solo ha puesto en valor el Dolmen de Alberite, sino que también ha incentivado la curiosidad y el respeto por la herencia cultural, inspirando a la comunidad local y a los visitantes a mirar hacia el pasado con reverencia y admiración.

¿Qué significan las pinturas y grabados en el Dolmen de Alberite?

Las paredes del Dolmen de Alberite se adornan con una galería de arte misteriosa y simbólica. Entre las formas y figuras, podemos distinguir representaciones de armas, figuras antropomórficas, soles y serpientes. Estas imágenes, más que simples decoraciones, son un lenguaje visual que comunica las creencias espirituales y la visión del mundo de sus creadores.

Las pinturas y grabados pueden ser interpretados como un mapa cósmico, un reflejo de la conexión entre la comunidad neolítica y los ciclos de la naturaleza. La recurrente figura del sol sugiere una veneración hacia esta fuente de vida y energía, mientras que las serpientes pueden simbolizar la renovación y la eternidad. Estas representaciones, al ser plasmadas en el lugar de descanso final de los individuos, hablan de una esperanza en la continuidad más allá de la vida terrenal.

¿Cuál es la estructura y diseño del Dolmen de Alberite?

La estructura del Dolmen de Alberite es una hazaña de la ingeniería prehistórica. Con una galería que se extiende a lo largo de 23 metros y un diseño trapezoidal, este sepulcro de galería cubierto se abre como un portal hacia el pasado. Su orientación al Este no es casual; permite que, con la llegada del alba, los primeros rayos de sol penetren la cámara, llenándola de luz y quizás, en tiempos antiguos, de significado espiritual.

La entrada monumental del dolmen, que preside el acceso al recinto, es en sí misma un símbolo de la importancia del lugar. La complejidad de su construcción, que requería tanto de planificación como de un esfuerzo colectivo para el transporte y ensamblaje de las piedras, refleja una sociedad organizada, con jerarquías y roles bien definidos.

Para quienes tenemos la oportunidad de visitarlo, caminar a través de esta estructura es retroceder en el tiempo, imaginando la mano de obra, las herramientas y la dedicación puestas en su edificación. Es una experiencia que conecta al visitante con la tenacidad y el ingenio de nuestros antepasados.

¿Qué se puede aprender de las excavaciones en el Dolmen de Alberite?

A través de las excavaciones en el Dolmen de Alberite, hemos desenterrado no solo objetos y estructuras, sino también conocimientos que nos conectan con la historia humana. Cada capa de tierra removida ha sido una página en la historia, revelando gradualmente la complejidad de la vida neolítica y las tradiciones de aquellos que nos precedieron.

La información obtenida, desde las herramientas de la Edad del Cobre hasta los huesos pintados de ocre, nos habla de una cultura que valoraba tanto el trabajo del campo como los rituales funerarios. La presencia de elementos de lujo en los enterramientos sugiere una emergente desigualdad social y una jerarquía cultural que distinguían a algunos individuos de otros.

Este dolmen, uno de los más antiguos en la península, es una pieza clave para entender la evolución de las sociedades agropecuarias y la importancia de los ritos de paso y los símbolos de poder en la antigüedad.

Para enriquecer aún más nuestra comprensión de este sitio, os invito a ver un vídeo que ilustra la magnificencia del Dolmen de Alberite:

En lo personal, como amante de los dólmenes, considero que estas excavaciones han sido una ventana invaluable al pasado, una forma de dialogar con nuestros ancestros y aprender de sus logros y su cosmovisión. El Dolmen de Alberite no es solo un conjunto de piedras; es una herencia viva, una enseñanza de la historia y un recordatorio de la profundidad de nuestra conexión con la tierra y con aquellos que, siglos atrás, la caminaron antes que nosotros.